Martes, 10 de enero 2012
"Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, Que traigamos al corazón sabiduría. Salmos 90: 12"
Una profesora de una escuela secundaria tenía una manera muy singular de estimular a sus estudiantes a pensar. De vez en cuando escribía en la pizarra breves mensajes que no estaban relacionados con lo que estudiaban en ese momento. Una mañana, los estudiantes encontraron el numero 25.550 escrito en el pizarrón. Uno de los alumnos levantó la mano y preguntó al instructor por qué estaba allí ese número en particular. Ella explicó que 25.550 era el numero de días que hay en la vida de una persona que vive 70 años. La profesora estaba tratando de hacer hincapié en la brevedad de la vida y el valor que tiene cada día. Cuando yo era joven y miraba al futuro, el tiempo parecía pasar muy lentamente. Era difícil imaginar lo que decían a menudo las personas mayores: que el tiempo pasaba volando que se preguntaban adonde se había ido. Pero conforme voy envejeciendo, los años parecen cortos y efímeros, sobre todo cuando los comparo con la eternidad.
Esto subraya lo que Santiago decía de la vida: <
NO TE LIMITES A PASAR EL TIEMPO; INVIÉRTELO.
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pastor SAMUEL RICARDO siervo de Jesucristo
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