sábado, 1 de noviembre de 2008

ÉXODO 04: 01-05. Texto: DEUTERONOMIO 6: 22






















En este capítulo se continúa y se concluye la conversación de Dios con Moisés desde la zarza ardiendo. Después, Moisés toma a su familia y se pone en marcha hacia Egipto. Tiene problemas en el camino por no haber circuncidado antes a su hijo, pero también tiene la satisfacción de encontrarse con su hermano Aarón. Presenta finalmente su comisión ante los ancianos de Israel, con gran gozo para ellos, y así se pone en marcha el proceso de la gran liberación de Israel.
1.- Moisés objeta que, con toda probabilidad, el pueblo
no le creerá ni oirá su voz (v.1); esto es, no darán crédito a sus palabras, a no ser que les muestre alguna señal. Y, si hay entre ellos contradictores que pongan en duda su comisión, ¿ qué tendrá que hacer con ellos? II. Dios le da poder para hacer milagros, detallándole tres en particular, dos de los cuales son ahora inmediatamente realizados, para que así quede satisfecho. 1. La vara que tiene en su mano es objeto del primer milagro ; milagro doble, porque, en arrojándola de su mano, se convierte en una culebra; y, tomándola otra vez (y por la cola, no por el cuello, que es por donde las toman todos los domadores de serpientes), se vuelve a convertir en vara (vv.2-4). Aquí Dios otorga un gran honor a Moisés, concediéndole realizar este milagro con sólo arrojar la vara y volverla a tomar; sin ninguna frase mágica, sin encantamiento de ninguna clase. El recibir este poder de parte de Dios, de actuar fuera del curso ordinario de la naturaleza y de la providencia, fue una demostración de la autoridad que Dios le otorgaba para establecer una nueva dispensación del pacto de gracia. Había también otro sentido simbólico en el milagro mismo: Faraón había convertido el cetro de su gobierno en serpiente de opresión, de la que Moisés mismo había huido a Madían. Otro : En la corona del Faraón había una serpiente como simbolo de su poder.

No hay comentarios.: